18 oct 2008

Una plaga de ratas en los juzgados de Dénia daña los archivos y alarma a los funcionarios.
Las ratas se han adelantado en Dénia a los planes de la Conselleria de Justicia de aligerar los archivos judiciales. Una plaga de roedores está haciendo estragos en los juzgados del Palacio de Justicia de la Marina Alta en lo que supone un grave problema de higiene e incluso de seguridad, dado el valor de muchos de los documentos que allí "se amontonan".
Y es que lo que está sucediendo en los juzgados de Dénia no es la aparición "esporádica" de algún ratón, algo que "suele suceder a veces en este tipo de edificios grandes y en los que se guardan tantos papeles", explicaba ayer el responsable de Justicia de CC OO en Alicante, Diego Beltrán. Es "una jauría". Hace unos días, una trabajadora abrió un cajón de carpetas colgantes y se encontró dentro una rata con todas su crías; "hasta han anidado ya allí", relató el portavoz sindical.
El sindicato denunció la situación a la Administración de Justicia, en Alicante, que tramitó la denuncia a la Dirección General de Justicia en Valencia. Al parecer, la solución pasa por enviar un equipo de desratización, "pero me da la impresión de que no se lo están tomando en serio", pues la medida se sigue aplazando; "esta misma mañana -por la de ayer- he vuelto a hablar con la administración y no hacen caso", lamentaba Beltrán. Y mientras, se agota la paciencia de los funcionarios, hasta el punto de que "los compañeros" del juzgado dicen que si "en lo que queda de semana" no se ponen soluciones, la próxima "se plantearán si entrar o no a trabajar".
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1 comentario:

miguel álvarez dijo...

Un ejemplo más de la ignorancia y desprecio de la Justicia hacia sus archivos; porque vamos, eso de que en España y en pleno siglo XXI los papeles de un archivo se vean amenazados por el ratonil acicate, debido a las calicatas que puedan practicar los roedores a través de los legajos, me suena a historia de los archivos, no al presente.

Pero no es de extrañar. La ignorancia y desprecio de la Justicia hacia sus archivos y los trabajadores de éstos, puede llegar a hacer decir a alguna figura con cargo "importante", que el trabajo a realizar en los archivos judiciales puede desarrollarlo la chica (sic) que tengo en casa; o que la solución a los problemas en los archivos judiciales no está en la contratación de personal técnico, sino en la incineración o el reciclaje del papel...

Todavía no entiendo muy bien con el tiempo que llevamos de Democracia que no se haya metido mano en el tema de la justicia para que su personal no haga lo que le venga en gana, se evite el corporativismo, y no se consideren por encima del bien y del mal despreciando a toda profesión que no esté directamente relacionada con la Justicia.

Se ha actuado sobre el ejército ¡que ya es difícil! y hoy en día es impensable que un militar construya un chalé con soldados y materiales que saque del cuartel; se surta "gratis total" en el economato y panadería militar; o arregle un coche particular empleando los servicios de un soldado chapista o mecánico. Sin embargo, no es impensable que en Justicia se desprecie a cualquier profesional no jurídico; se llegue al trabajo a las 10 y se salga a las dos -café por medio-; se acuda al juzgado sólo los días en los que hay vistas; o que en algunos órganos judiciales hayan desistido de implantar el control horario porque lo de fichar no funcionaba y se conformen con que, al menos, se trabajen cinco horas al día... ¡País!